sábado, 1 de diciembre de 2012

La Posta de los Viejos Mañosos


Carlitos me recibió como a un embajador. Me ofreció vino, me dio charla, cocinó y me pidió ayuda. Hicimos empanadas fritas en grasa con un toque de ajo; carne al horno y una bolognesa de asado de ayer. Comimos a reventar.

En la sobremesa, Carlitos sacó el tema del contrabando de zombies.

Yo no entendía nada.

Carlitos dice que tiene la posta y que quiere ganarle de mano a La Anguila.


martes, 27 de noviembre de 2012

El Fuego Inolvidable


Sin poder hacer foco, empecé a dudar de todo. Caminé sin rumbo por el bosque y junté leña, llegué a la cabaña y prendí un fuego inolvidable.

En algún momento perdí contacto con el Gordo, pero no puedo recordar cuándo ni por qué.

Siento que estuve boyando durante meses... Abducido. Por un momento estuve asustado, incapaz de diferenciar entre realidad e ilusión, entre presente y pasado.

Mirando al fuego, volví de las alucinaciones, del futuro.

Golpean la puerta. Son los viejos mañosos invitándome a un asado.

Me dejaré llevar, mientras ato cabos sueltos.

lunes, 26 de noviembre de 2012

Puertas Abiertas



La conversación que estaba manteniendo con la Gata Montesa se interrumpió cuando feroces golpes azotaron la puerta de mi oficina.

Abrí y no había nadie. Qué bronca. Me asomo y veo pasar a ese gallego hediondo… Personaje nefasto e inoperante, que sobrevivió tanto tiempo por su obsecuencia y particular sentido del humor.

Lo putié por el pasillo y lo encaré en su escritorio. Le pregunté si estaba prohibido cerrar la puerta y me respondió que “Tú sabes que queda feo, eres grandecito. Estamos en una oficina pública y una barrera de ese tipo es una muestra de agresión. Quien cierra la puerta oculta algo, o se está durmiendo una siesta.”

Este Paladín de la Apertura también se dedica a colgarle cartelitos a quienes osen cerrar sus puertas; y su visión es compartida por otros: como Shrek, quien demostró ser un gordo chupavergas con el paso del tiempo. Un perrito faldero de la Anguila.

En la obra reina una peculiar discrecionalidad de masa. Las reglas las define tácitamente el grupo y todos deben ajustarse a ellas; no importa si la desviación perjudica o no a alguien. Hay que hacer lo que hacen todos. Es obligatorio. Lo diferente, ofende, repugna. Cerrar una puerta es más agresivo que golpearla brutalmente; porque esos golpes fueron dados con el martillo de la justicia.

Tal vez la moda pase y todas las puertas se cierren… Lo importante es evitar ser el primero, porque la supervivencia en este ambiente depende de pasar desapercibido. Llegado el caso, la masa definirá la regla y todos se ajustarán a ella. Nada quedará en papeles, sólo en la conciencia colectiva.

No importa si alguien pierde más tiempo en estar pendiente, diseñar un cartelito, imprimirlo y pegarlo en la puerta de alguien que decidió cerrarla; tampoco importa si quien cerró la puerta estaba en una conferencia o en una conversación privada… El hecho social se impone ante el individuo como una realidad ajena y coercitiva. Una irracional institución pasajera.

viernes, 23 de noviembre de 2012

El Pony Blanco


Sólo diré que estuve cabalgando un Pony Blanco...

Con más tiempo, podré explicar mejor todo lo que pasó en el último mes.

Estuve muy disperso... Es hora de volver a la realidad.

jueves, 18 de octubre de 2012

El arte de primerear y ningunear



Al Primero lo ningunean cuando el Segundo lo primerea. Cuando se habilita el primereo, se legitima el ninguneo.

Primerear es el arte de sacar ventaja simulando respeto por la igualdad de condiciones y las normas éticas. El artesano del primereo busca saber algo que otros no saben. Tener el dato antes, a como dé lugar.

El artesano es un hombre de acción, consigue, llega, concreta. Él se ocupa, le pone el pecho a las balas, apuesta: si sale todo bien, será el primero; si sale todo mal, nadie podrá echarle la culpa al segundo.

El artesano toma de rehenes a los defensores del orden, la cooperación, las reglas y la igualdad de condiciones. El artesano encuentra la grieta en la estructura normativa y de a poquito la profundiza. El artesano tiene en pie de guerra a los defensores del orden, la cooperación, las reglas y la igualdad de condiciones. El artesano profundiza la grieta y de a poquito la propaga a toda la estructura normativa. El artesano socava el orden, la cooperación, las reglas y la igualdad de condiciones; los vuelve obsoletos, inútiles, inoperativos y contrarios a la causa. El artesano trabaja mañana, tarde y noche. El artesano nunca ninguneará al Primero, dejará que otro lo haga.

Este artesano es el eterno Segundo que llega siempre Primero.

viernes, 28 de septiembre de 2012

Cumpleaños



Cada vez soy más amigo de los que habitan mi desván.

Gracias Jesús por el cuchillo, gracias Gata Montesa por proteger mi espíritu.

Feliz cumpleaños.

martes, 25 de septiembre de 2012

Vasco mirando al sudeste


Txapela, cigarrillo liado y mirada de siglos.

"Hola, soy Jesús."

Tras la infame peripecia a Ucrania, regresé a mi cabaña; porque no podía seguir ausentándome de la obra. Allí me encontré a este cuchillero vasco, de aspecto sombrío y demacrado, caminante del mundo... Mi nuevo compañero de casa.

Ni siquiera eran las seis de la tarde y el vino ya estaba abierto. Papitas, y más puchos. Charlamos mucho, de Lugo y Manressa, de hongos y pescados... De revolución, de lucha armada.

A pocos días de mi cumpleaños número treinta y tres: un etarra llamado Jesús vino a visitarme.

Presagios de combate, camino del destino.

sábado, 15 de septiembre de 2012

A través de los kilómetros, a través de los tiempos


Caminamos y caminamos. El invierno recrudecía como a principios de julio. Volvía a pasarnos de vuelta, la desorientación temporal tropical. Un Caribe helado, un trópico de Géminis; de Gemelos y Liebres muertas, de Cuernos Rojos en pie de guerra y Tramposos engendrando la naturaleza.

Imágenes recurrentes, incesantemente molestas, acosadoras e inoportunas para una tortuosa caminata de cientos de kilómetros.

Cargando el ánimo en la mochila, pensé en Ompel.

Un pobre tipo, como nosotros.

viernes, 14 de septiembre de 2012

Aterrizaje forzoso


Nuestro escuadrón de Antonovs aterrizó en Ushuaia, con la idea de ensamblar a los Zombie-Cyborgs en la zona franca y fomentar un poco la industria nacional. Seis de las naves cargaban zombies y las otras cuatro, piezas metálicas para mejorarlos cibernéticamente.

Lamentablemente, prohibieron de un día para otro las importaciones, y no pudimos nacionalizar los bienes. Sumado a eso, el alquiler de las aeronaves era muy caro y debimos vaciarlas a las apuradas y dejar todo tirado en un descampado.

Cuando terminamos de bajar el último fierro, nuestra indignación era insoportable. Bronca, vergüenza. Nos sentíamos tan estúpidos por habernos embarcado en una peripecia insólita, a nuestro riesgo, para sacar adelante una obra pública cuyo propio y principal interesado se encargaba de boicotearla.

La única manera de terminarla quedó varada en la aduana.

Esta obra está destinada a no terminar más, nos quedó claro.

Rendidos, nos tiramos a dormir.

Al día siguiente, ya no quedaban zombies... se habían escapado. Tampoco quedaban partes metálicas... se las habían robado. Tratando de ayudar, creamos un mal mayor: zombies y material nuclear a la deriva por la estepa Patagónica.

lunes, 3 de septiembre de 2012

El Terrorista



terrorismo.
1. m. Dominación por el terror.
2. m. Sucesión de actos de violencia ejecutados para infundir terror.

terror.
3. m. por antonom. Método expeditivo de justicia revolucionaria y contrarrevolucionaria.

En el ajedrez ninguna ficha explota para acabar con otras. No va con la lógica del ajedrez, no va con la lógica de la civilización occidental y cristiana. Muere la ficha, gana la causa.

Vuela la presa, se agota el agua y la anguila muere. No hay tiempo para cavar acequias.

Hacia un nuevo modelo de gestión...

sábado, 1 de septiembre de 2012

El Francotirador y el Terrorista


El Ucraniano nos contó que el mercado negro de zombies está en auge porque son baratos, dóciles, programables y no tienen problemas en inmolarse... ni ellos, ni sus familias. El Pentágono llegó a la conclusión de que la única forma de combatir al terrorismo es con más terror; pero el gobierno de los Estados Unidos, de cara a los votantes, no puede admitir que está permitiendo y desarrollando la experimentación con zombies con fines bélicos, por eso manejan todo desde la ilegalidad.

Nuestro viejo amigo se convirtió en un gran trader de zombies y de upgrades tecnológicos. Generalmente, el zombie llega muy maltrecho y es necesaria una reparación mediante injertos cibernéticos. Hoy la vieja central de Chernobyl funciona clandestinamente como una gran usina de macumba industrial. La radiactividad espanta a los curiosos y a cualquiera que se pregunte por qué hay olor a quema de carbón mineral, si la zona supuestamente está despoblada a kilómetros a la redonda.

El Ucraniano y el Gordo coinciden en que la única forma de finalizar esta obra es con Zombie-Cyborgs; porque la Anguila se ocupó de volver imposible, incoherente y embarrado todo, para que nadie quiera meterse y él pueda seguir robando por los siglos de los siglos. Desconcierta de la Anguila su total falta de escrúpulos y remordimiento cuando rompe todos los códigos establecidos. Él respeta únicamente los suyos: él es un psicópata.

Y para detener a un psicópata, nada mejor que un Gordo paranoico:

"No basta con un francotirador para detener a la Anguila; se necesita una red terrorista."

miércoles, 29 de agosto de 2012

Destino Chernobyl


Tras 20.000 días de espera en el salón VIP, el estado provincial terminó de construir la pista y pudimos despegar, luego de una demora de 1.000 días en la partida del vuelo.

La Gata Montesa vino a despedirme, nos dimos un largo abrazo y me deseó suerte.

Evidentemente el Gordo estaba obsesionado con las paradojas del proyecto, el método, la maña, el profesionalismo y la política. Si bien durmió durante todo el viaje hasta Chernobyl; entre ronquido y ronquido balbuceaba una suerte de mantra...


"El proyecto es político. Si es político, no es técnico. La técnica es método, la política es maña. La profesión es metódica, la política es mañosa. La maña es virtud si acompaña al método. La maña es vicio si reemplaza al método. La política es vicio si reemplaza a la técnica. El proyecto es político. Si es político, no es técnico..."



Cuando el balbuceo comenzaba a tornarse tedioso, el comandante anunció que faltaban pocos minutos para aterrizar en el aeropuerto de Kiev.


En Chernobyl nos esperaba el Ucraniano, viejo amigo y flamante traficante de zombies.

lunes, 27 de agosto de 2012

El método y la maña

Un aeropuerto... 

... sin pista.

Finalmente no pudimos salir. Un piquete de la UOCRA impidió el paso del tren; y la alternativa aérea se canceló por la falta de pista.

Como teníamos mucho tiempo, nos quedamos en el salón VIP del aeropuerto tomando whisky y esperando a que construyeran la pista por donde despegaría nuestro avión con destino a Chernobyl. Realmente no hay apuro...

A nuestro lado, dos ancianos jugando al ajedrez; uno metódico y otro mañoso. Repentinamente, el metódico patea el tablero y le lanza un florilegio de insultos al otro, quien se mostraba sorprendido. El viejo metódico se levantó y abandonó el salón de un portazo, mientras el otro acomodaba nuevamente las fichas, riéndose por lo bajo.

El encargado del salón nos contó que esta escena se repite desde hace muchos años. Resulta que el metódico gana hasta que el mañoso lo saca de quicio. El mañoso canta, golpetea la mesa, se levanta y vuelve, recrea jugadas retornando fichas caídas al tablero... y así enreda al metódico, quien descansa en las reglas del juego, los códigos de conducta y la confianza. Cuando el metódico está a punto de ganar el juego, el mañoso declara que algo anda mal... porque no debiera haber dos alfiles blancos en casilleros blancos.

Ante los ilusos ojos del metódico, el mañoso torna incoherente el tablero; subsumiendo a aquél en el cómplice barro de una cancha inundada.

Mientras el metódico explota de furia y deja la sala, el mañoso se queda en ella sonriendo de costado.

Y nosotros tomamos whisky caro gratis en un aeropuerto sin pista.

lunes, 13 de agosto de 2012

Cielos Variables


Y la nieve volvió en el cumpleaños de mi querida Valkiria; casi como un presagio, un aviso... un dulce y protector susurro al oído.

"Get some shelter"

Mañana partimos con el Gordo.

domingo, 12 de agosto de 2012

Domingo Jauría


Empezamos a caminar...


... y nos internamos en el bosque.


Cruzamos el río.


Comimos caballo muerto...


... y, acechando al lobo, llegamos al Jardín de Orlok.

viernes, 10 de agosto de 2012

Salir a Comprar


De vuelta en el sur... territorio de La Anónima.

Distracción y descanso mental a la salida de la obra. Santuario multireligioso.

Momento de placer, de gastar con gastos pagos.

Lentejas, hongos secos, manzanas, cebollas, frutas secas y vino.

Pequeño placer, humilde placer.


jueves, 2 de agosto de 2012

Trincheras y Acequias


En la guerra se descansa cavando trincheras; y en esta guerra, cavando acequias.

Pero la guerra no se gana cavando trincheras... recordarán los Franceses su inútil Línea Maginot.

domingo, 29 de julio de 2012

Casita


De vuelta por un tiempo.

El concepto de descanso cambió para siempre... Un Winnebago me recomendó estar siempre alerta y mirando al horizonte... como el centinela, como el francotirador.

"Trabajando de a poquito, se descansa más... A los moros siempre conviene verlos de lejos; no cuando están entrando a tu casa."

Será todo un desafío estar alerta sin estar manija.

domingo, 22 de julio de 2012

La Segunda Advertencia Winnebago


El Tramposo se disfraza de animal, de caballero, de héroe. Nunca rompe las reglas, sólo las dobla un poco, encuentra el hueco y pasa de manera escurridiza… como una anguila. Cuando necesita que una regla se rompa, espera a que otro la rompa; y si no puede esperar, apela a su elusiva inteligencia para desencadenar una cascada de tradición oral: le dice a uno que otro ordenó hacer algo y aquél, desprevenido, rompe la regla… y la anguila pasa.

El Tramposo es amistoso y educado; invita, sonríe y felicita. También escucha atentamente las inquietudes del prójimo, lo reconforta y lo tranquiliza; para que éste descanse en él, se apoye y confíe. Nunca se lo verá de mal humor, ni cansado, ni levantando la voz, ni confrontando. Él eludirá todo ataque.

El Tramposo; cuando una situación se torna insostenible para todos, grita a viva voz: “Dejen… Yo me encargo”. Destraba conflictos, y se pone al hombro la responsabilidad de todos; quienes callan y otorgan.

La anguila deja correr el agua, el caballero sacrifica su capa para que las señoritas puedan pasar a través del charco, el héroe se ofrece a embarrarse con el consentimiento de todos, y el Tramposo es cada uno de ellos.

“Nunca atraparás a una anguila en el agua. Para atraparla, deberás drenar toda el agua. El agua es tradición oral, la acequia es palabra escrita.”

Dijo la Gata Montesa.

jueves, 19 de julio de 2012

Soldador de la Fortuna



soldar.
(Del lat. solidāre, consolidar, afirmar).
1. tr. Pegar y unir sólidamente dos cosas, o dos partes de una misma cosa, de ordinario con alguna sustancia igual o semejante a ellas.

Ya quedan pocos... Van huyendo o muriéndose de frío.

Si dividiéramos el infinito en cuatro partes, cada parte sería también infinita. Tuvimos la mala suerte de caer en invierno, el cual se hizo eterno.

"¿Te das cuenta, no?"

Me dice el Gordo al oído, apretando los labios contra sus dientes.

"Esto no termina maaaaaaaaaaaaaaaaaaaaas..."

Hay dos cosas que ya no pueden unirse ni pegarse más: la realidad y la racionalidad. Todo perdió su lógica. Todo. Ya hablo poco con el viejito, porque me angustia oír cómo se amarga cuando le cuento la realidad... Una realidad lejana, muy lejana a su eterna, pétrea e inútil racionalidad. Me da pena verlo indefenso, en un juego sin reglas, y mucho menos reglas escritas... una anarquía de tradición oral. Por ese motivo, no lo llamo más.

Tampoco le voy a pedir permiso para ir a Ucrania a cazar Zombies Radiactivos y traerlos en vagones hasta la Patagonia para soldar. Esta obra, de alguna forma, debe terminar... Y si el destino es que nunca termine, al menos debemos pasar el invierno.

A Ucrania, Gordo... Nos vamos a Ucrania.

martes, 17 de julio de 2012

Un rayo de esperanza



"¿Te acordás que yo siempre decía 'Esto termina mal'? Bueno... Me equivocaba. ¿Sabés por qué nunca iba a terminar mal esto? Porque esto nunca, nunca, nunca va a terminar..."

El Gordo me planteó primeramente esa paradoja como explicación a su regreso.

"¿No te diste cuenta? Desde que comenzó nuestro viaje en Colombia todo se tornó bastante extraño. Las paradojas exprimen la realidad como un limón, y algunas gotas salen volando al ojo de Dios. El accionar de Construx fue tan paradójico, que demandó soluciones igualmente paradójicas; a fin de intentar contrarrestar el desbalance generado..."

Siempre fue muy exagerado; pero esta vez tenía una a favor para creerle: volvió de la muerte.

"... Pero esto retorció aun más la realidad, y a través de ese vórtice pude pasar yo. La realidad perdió sentido... Por lo menos el sentido al que estábamos acostumbrados. ¿O acaso tiene sentido traer legiones de Zombies-Cyborg de Chernobyl para poder terminar esta puta obra, o que aparezca un vagón en lo alto de una montaña y viajemos en él, o que los indios Winnebago de Norteamérica te puedan advertir cosas en el extremo sur del continente? No... Nada de eso tiene sentido; pero hay que acostumbrarse a convivir con los fantasmas y seguir si queremos ver una luz al final del túnel... aunque nunca salgamos de él. Nuestro camino es una asíntota. Esta obra nunca va a terminar. Sabélo... Ojalá tengamos suficientes municiones."

Paradójica esperanza tenemos.


domingo, 15 de julio de 2012

La advertencia Winnebago


El Héroe del Waikan no puede morir.

Si se pide la cabeza de la Liebre, se recibe la cabeza del Gemelo. Si la cabeza de la Liebre es la cabeza del Gemelo, entonces la Liebre es el Gemelo.

Si la Liebre es el Gemelo, el Tramposo sería el Cuerno Rojo. Si se pidiera la cabeza del Tramposo, se recibiría la cabeza del Cuerno Rojo.

El Cuerno Rojo está en pie de guerra. El Cuerno Rojo es el menor de diez hermanos, y es Aquél que usa cabezas humanas como aritos.

Hoy comprendí que el Héroe del Waikan no debe morir.

sábado, 14 de julio de 2012

La Gata Montesa


Ayer, cuando anochecía, salí a caminar. Mis amigos se negaron a acompañarme... por un motivo que más tarde comprendería.

Se cruzó sensualmente delante de mí y se detuvo. Mi corazón se detuvo, también el tiempo. Me clavó su enigmática mirada. Sagrado espíritu mapuche de fluorescente silencio.

Y siguió.

Respiré.

viernes, 13 de julio de 2012

En el teléfono con el viejito



Camino mirando al suelo congelado con el teléfono en la oreja. Parece la Luna... piso las huellas de los boogies espaciales mientras espero que el viejito atienda. Atiende y lo saludo muy cálidamente... Siempre lo saludo así, aunque a veces me atienda medio cabrón. No importa. Hay que mantener la buena onda.

El viejito me había puesto una infinidad de pétreos objetivos... Por esta rigurosidad es que la Anguila lo llama  "El Ministro". Hay pica entre ellos dos: uno demasiado prusiano, otro demasiado gitano.

Afortunadamente el viejito fue cediendo en sus exigencias a medida que yo lo iba poniendo al tanto de los problemas reales en la obra. Se nota que nunca vino a la obra y que prefiere manejar todo desde unas alturas ministeriales.

A veces levanta la voz para taparme y continuar con su monólogo; a veces se ríe de mis chistes.

Hoy se rió cuando le dije que la única manera de terminar esta obra es trayendo legiones de obreros Zombies-Cyborg de Chernobyl... Pero esto no era un chiste.

jueves, 12 de julio de 2012

En el Vagón


El Gordo me había pedido que me dejara de joder, subiera una vez más al vagón y lo esperara adentro. El viejo no estaba, pasé y me senté. Empezó a moverse y ya era imposible detenerlo.

Por la ventana seguía viendo nieve, pero la vegetación era otra... Pinos como aquellos camino a Turku.

Mensaje del Gordo: ***Banca 2 seg. Toy llegando. T explico todo.***

A mis espaldas se abrió la puerta del vagón y volví a sentir por primera vez en mucho tiempo los típicos gritos del Gordo cuando habla por teléfono. Para variar, se estaba puteando con alguien... ¿Pero quién?

"Si, si, si, si, dale, dale, dale... Daaaale. Chau."

Qué alegría verlo de vuelta.

"¿Sentís ese olor? Macumba industrial... Eso pasa, papu. Preparate."


Ahora el francotirador tiene artillero.

martes, 10 de julio de 2012

El Desencantamiento del Mundo


El viaje en el vagón me dejó confundido y el olor del miedo volvía a perturbarme... No entendía lo que pasaba. Temí estar alucinando, estar viviendo una realidad sobrenatural de fantasmas y voces del más allá. Me atemorizó la irracionalidad... dejarme llevar por ella.

Las palabras de mi jefe, el viejito, me dieron paz: "nunca dejemos de ser profesionales"

Puse distancia y me compenetré en el trabajo de manera ascética, porque sólo ello me traería paz. Entendí entonces el sentido de "La Ética Protestante y el Espíritu del Capitalismo"; el libro que me recomendara el viejito.

Paz a cambio de desencantamiento. No más fantasmas, no más viajes místicos, ni charlas con el más allá, no más salvaciones mágicas, ni confesiones, ni perdón... Sólo trabajo.

El trabajo da paz, el trabajo libera, el trabajo es un llamamiento de Dios.

domingo, 8 de julio de 2012

Jumbo Blimp Jumbo


Otro domingo tranquilo en el fin del mundo. La obra vacía; muchos no pasaron el control de alcoholemia matutino. A la tarde ya quedaban unos pocos operarios; y jugaban como pelotudos tirándose bolas de nieve.

Llegué temprano a la cabaña y me fui con mis amigos para lo del viejo del vagón. Llevé la cámara y le saqué una foto a su morada.

Golpeé la puerta y se abrió sola. No estaba el hombre. Hoy hacía mucho frío y nevaba, entonces entré a guarecerme.

Me senté un rato a observar el infinito a través de la desvencijada ventana... Como en un Jumbo posnuclear, o un dirigible de chapa... un blimp. Abstraído, mudo, tarado. Contemplando la inmensidad acotada por una ventana.

No sé cómo llego este vagón hasta aquí, y no sé cómo llegué yo hasta este vagón. Me quedé dormido y me pasé de estación... Desperté en verano.

Recién pude volver al invierno entrada la madrugada; y caminé hasta casa envuelto en el olor del miedo.

jueves, 5 de julio de 2012

La inteligencia del erudito y la paz del ignorante



Finalmente, tampoco de Dios podía esperar aquella ayuda, pues también Cristo únicamente murió por los elegidos, destinados por Dios desde la eternidad para ofrecerles el sacrificio de su vida. Tan absoluto abandono (no concebido por el luteranismo hasta extremas consecuencias), que le impide pensar en una posible salvación eclesiástico sacramental, constituía el factor contundente ante el catolicismo, en el que, justamente, hallaron el fin de las fases del “desencantamiento” del mundo, iniciado con las antiguas profecías judías y que, apoyándose en el concepto científico heleno, refutó los medios quiméricos para la salvación, tildándolos de supersticiosos, en extremo desmedidos.

Para ser sinceros, no es una novedad la idea de que el trabajo profesional moderno entraña carácter ascético. Goethe, con su proverbial comprensión de la vida, se propuso ilustrarnos acerca de ello, en momentos de gran lucidez, encontrándose en el pináculo de la fama.


Evidentemente, en el vocablo alemán “profesión” (beruf), aun cuando tal vez con más claridad en el inglés “calling”, existe por lo menos una remembranza religiosa: la creencia de una misión impuesta por Dios.

miércoles, 4 de julio de 2012

Charlando con el Gordo

Remera-Ouija para comunicarse mejor

El Gordo se comunica conmigo desde que me dieron la BlackBerry... No siempre contesta cuando lo necesito. Sea en el cielo o en el infierno, sigue siendo el mismo gordo panceta de mierda.

Hoy apareció y charlamos un rato largo. Él me guía en este incierto y solitario camino. Antes éramos una tropa; mientras que ahora hay sólo un francotirador, cuyo hombre de mayor confianza es apodado "la Anguila"... Panorama complicado.

Se extraña la hermandad incondicional. Acá caí en un grupo ya armado, un rancio puterío de años, donde cada fumaverga tiene su lugar asignado.

Si el Gordo me dice "estás hundido", significa que deberé aprender a nadar en lo profundo.

Cambio y fuera.

domingo, 1 de julio de 2012

El Francotirador


francotirador, ra.
(Calco del fr. franc-tireur).
1. m. y f. Combatiente que no pertenece al ejército regular.
2. m. y f. Persona aislada que, apostada, ataca con armas de fuego.
3. m. y f. Persona que actúa aisladamente y por su cuenta en cualquier actividad sin observar la disciplina del grupo.

El francotirador busca el punto más alto del campo; y una vez allí, espera.

Llegar implica mirar el mapa, pensar la estrategia, la táctica y lanzarse a atravesar terrenos, esquivar minas, disparos, sufrir hambre, frío y sed. Es largo, tedioso y silencioso el camino hasta la cima. Nunca debe revelar su posición; con la única excepción del artillero, quien lo pertrecha. Y si el artillero delata, el francotirador debe dispararle.

En un viejo vagón de tren ubicado en lo más alto del monte vive un viejo. Abrió la puerta cuando pasé con mi manada y me habló. Solitario y tranquilo, amable y atento. Testigo de fantasmas que le golpean la puerta de noche y se van antes de poder atraparlos.

Prometí volver a visitarlo, y el viejo se alegró.

viernes, 29 de junio de 2012

Cuentos chinos, de terror, de cizaña

Flores muertas en tu tumba.


Los viejos de acá son cuenteros. No sé si verseros... Cuenteros.

¿Era realmente necesario que Juan Carlos me recibiera al bajar del bondi alertándome sobre problemas y tiroteos?

Después del "Glup, dónde mierda me metí", no pasó nada. Nada.

Juan Carlos me cae mal porque no me mira a los ojos; porque intentó meterme miedo; porque me llevó al supermercado y recién en la caja me avisó que era yo quien debía pagar; porque casi me hace quedar para el orto con el compañero de cabaña que nunca fue. Llegamos aquella vez y me dijo: "Acá tenés un vino, cervezas, toallas... usa lo que quieras."

Suelo sospechar de quien no mira a los ojos, y esta vez me sirvió. No usé nada, salvo las toallas; porque esos no eran regalos de cortesía, eran pertenencias de alguien. Yo ya sabía: un gallego burócrata iba a cohabitar mi cabaña; pero fue al llegar cuando éste se enteró de mi presencia, y puso el grito en el cielo. Nadie le avisó nada, se cabreó y se las picó.

No hay mal que por bien no venga. Excelente. Ahora ningún gallego de mierda me rompe las pelotas.

Otros cuenteros son los viejos mañosos, pero a diferencia de Juan Carlos, me caen muy bien. Uno de ellos tiene un escorpión tumbero tatuado en la panza y es un antiguo de la UOCRA; me contó la historia de Copito, un perrito de la obra que viaja en el bondi, sube y baja solito. También me explicaron por qué en mi cabaña hay estampitas de la Virgen, una botella de agua bendita y ramos de olivos... Porque el anterior ocupante oía cosas, veía cosas raras y rogó por un cambio de casa. El cementerio está muy cerca y vio una mujer de blanco caminando en medio de la noche.

Los viejos meten miedo para marcar su territorio, para ver cómo reacciona uno.

La cosa se resuelve fácil: si mis amigos no le ladran, no existe.

Anoche ladraron mucho...

jueves, 28 de junio de 2012

Ensaladas

Ensalada de caños

Una ensalada cimarrona... Inspirado por un día de mierda, fue lo mejor que me salió.

Si, le metí morcilla fresca picadita, lechuga y perejil a la ensalada criolla... y qué? Ahora no es criolla, es cimarrona. Cómanla, háganme el favor!

El único que le entró parejo a mi creación fue Azeem, un pakistaní experto en montaje mecánico de calderas, que se vino hasta el culo del mundo a enseñarles a estos gallegos brutos cómo carajo se arma el caro juguetito que compraron. Musulmán simpatizante de Al Qaeda, antiyanqui residente de Florida. Cráneo, borracho, personaje. Lo único que evita es el cerdo; el resto... adentro!

"They think they know a lot. They know shit!!"

Azeem se refería a los pedacitos de chorizo español que integran una variedad muy particular de ensalada cimarrona: este proyecto de mierda. Nadie sabe de lo técnico, nadie sabe de dirección de proyectos, nadie sabe quién es jefe de quién. Es una ensalada. También es una ensalada la documentación de subcontratos; y el Chef Roberto, gerente de compras, no sólo quiere hacerme lavar los platos: pretende que me coma todo lo que él prepara encerrado en su cocina inmunda; y encima se pone histérico cuando le devuelvo el plato. Concretamente: yo administro lo que él negocia... Y este salame tandilero negocia para el orto.

Hasta hoy no sabía si este endosador-compulsivo-de-muertos-con-copia-a-todos es sólo un inconsciente, meramente un imbécil, o lisa y llanamente: un hijo de puta. La Anguila me cantó la justa: "Es una combinación de las tres. Roberto compró todo como si fuera la línea de montaje de la Ford; pero esto es un proyecto y Roberto nunca estuvo en un proyecto. Le dieron mucha responsabilidad desde España y explota cuando alguien lo deja expuesto... Ni le contestes."

Igual voy muerto... me da consejos la Anguila. Espero que me dé un poco más de tiempo para aclimatarme antes de morderme.

Un cordobés culiáo me hinchó para cenar con el grupete de viejos mañosos y despejarme, porque me veía muy cruzado. Así es como hice la ensalada de Azeem, bebí, me olvidé de todo... y todo estaba más rico que la mierrrrrda!

martes, 26 de junio de 2012

Una aventura a la soberanía energética


Los fierritos de las paredes de la caldera parecen marchar por una plaza roja, en ocasión de un acto de exaltación nacionalista.

Las enormes piezas fabricadas en China yacen a la intemperie, a pesar de las indicaciones del manual del fabricante. En algún momento, si hay fondos y voluntad política, serán ensambladas para componer la gigantesca caldera que generará el vapor necesario para mover las turbinas de generación eléctrica fabricadas en Alemania. Ese vapor saldrá de las turbinas, se condensará en un enfriador diseñado y fabricado en Estados Unidos; y el ciclo energético volverá a empezar gracias al calor del carbón extraído de las entrañas del territorio patrio... que tal vez no sea suficiente y finalmente deba importarse desde Europa del Este.

La obra avanza lerda bajo la nieve; ejecutada por operarios de cada rincón del país, mal pagados y poco preparados para una obra de esta naturaleza y este clima hostil. Jornaleros de subcontratistas locales semi fundidos por las deudas de una contratista española corrupta e ineficiente, que se llevó la mejor tajada fuera del país.

En algún momento, si hay fondos y voluntad política, llegará la luz a las casas de quienes construyen la planta bajo la nieve.

A treinta años del conflicto del Atlántico Sur, y muy cerca de su escenario, la aventura de la soberanía se impulsa una vez más con la sangre y el sudor de soldaditos  mal pertrechados.

lunes, 25 de junio de 2012

El olor del miedo


Toda la noche sopló un viento terrible. Me desveló y trajo una lluvia espantosa que se llevó la nieve y dejó un lodazal inmundo. La combi nos pasó a buscar al horario de siempre y llegué mal dormido a la obra. Me registré en la entrada y marché sobre charcos y hielo hasta la oficina.

Un lunes de mierda... hasta que bajó la temperatura y volvió a nevar. Y nevó mucho.

Había arreglado con uno de los flacos ir al supermercado a la salida. Siempre hay que arreglar porque las distancias son enormes y la nieve dificulta aún más el transporte.

Volviendo en el auto, bajé la ventana para contemplar la niebla y sentí ese olor que tanto miedo me dio en Europa del Este. Persistente y omnipresente; asimilable a un vaho de aceite de motor quemado al carbón. Recordé la incertidumbre y la desvencijada soledad de Polonia, Ucrania y Serbia.

Ese olor estaba también acá, al sur de la Patagonia.

Quemando las entrañas de la tierra se calientan los hogares de aquí y de allá. El carbón de la mina huele así. Distinto a la leña y al carbón vegetal. Más brutal y menos místico. Pragmático y esencial.

En ese momento, cuando entendí, perdí el miedo.

Llegué y salí a caminar por la nieve y la penumbra con mis amigos.

domingo, 24 de junio de 2012

Entre Perros Esteparios


La Anguila no está; se fue a su casa de descanso y quedó a cargo de la obra uno de los sub jefes. Oscar, un viejo buenazo de bigotes y ojos claros, ingeniero civil de enternecedora parsimonia, infaltable sweater colorido, chaleco y polera. En su oficinita tiene pegadas láminas de la Virgen María y de un Santo de barba, que debe ser San Francisco de Asís.

Oscar y el viento nos regalaron la tarde del domingo, porque no se podía hacer nada en la obra. Llegué a casa temprano y aproveché para caminar un poco hasta que oí unos ladridos a lo lejos. Los perros me escoltaron desafiantes hasta la puerta de la cabaña, un poco ladrando, un poco moviendo la cola... Hasta que dejaron de ladrar.

Unas salchichas sellaron nuestra amistad. Caminé con ellos por la nieve.

Mirando la montaña le agradecí a Oscar, al viento, al cielo y a ellos.

Cada vez soy más amigo de los que habitan la estepa.

sábado, 23 de junio de 2012

Lejos


“Primero me fui lejos pensando que a la distancia iban a aprender a apreciarme, después me fui lejos para olvidar, luego me fui lejos queriendo que me olviden; y hoy me fui lejos porque no me queda más remedio.”

Una fanatizada charla de pesca entre dos viejos mañosos comenzó con esa frase y terminó con un asado.




jueves, 21 de junio de 2012

Empezó a nevar


Desperté a las 4 AM con dolor de cabeza y no me dormí más. Anoche me lucí cocinando para el jefe de obra y tomamos un poco de más. El jefe es conocido como "la Anguila"... porque es imposible agarrarlo en alguna. El Gordo desde el cielo, a través de la BlackBerry, me lo dijo; y también me dijo que tenga mucho cuidado con él.

Caminé hasta la combi bajo una lluvia helada a las 7:30 AM, dormité un poco en el viaje hasta la obra y llegué mareado. Allí ya estaba esperándome Shrek; un gigantón buenazo que también ama la cocina y lleva las cuentas en mi sector. Supuestamente yo soy su jefe; pero no me interesa decirlo ni marcarlo, somos socios en esta difícil tarea de bicicletear subcontratistas. No hay plata. En serio.

Shrek es muy prolijo y cuidadoso en lo que hace. Hoy charlamos y me contó la historia de este proyecto nefasto, que está a la deriva; él vio todo desde el principio. En una época dependía de Ompel; y este nunca logró nada. Pero aquél está tranquilo, tiene su vida armada y se lo ve feliz. Eso me alegra.

Pasado el mediodía empezó a nevar fuerte. Me abrigué y salí a caminar por la obra.

martes, 19 de junio de 2012

Hace exactamente dos meses




Hace exactamente dos meses (hora de Argentina) estaba cenando langosta en Red Lobster de Times Square; disfrutando de la última de mis semanas en el norte del continente. Sabía que era la última porque ya había decidido irme de la gran petrolera nacional.

Hace exactamente dos meses no me había cruzado aún con ella, ni se me había desmoronado la vida entera por todo eso que finalmente no fue.

Pero así tenía que ser, darse, pasar y dejar atrás como las ovejitas esteparias que se ven por la ventana.

El aire del sur hace olvidarlo todo... lástima que existan comprobantes perdidos entre las páginas de un libro.

lunes, 18 de junio de 2012

Sweet Home Río Turbo


Después de tres horas de avión, dos horas de espera y cinco de bondi, llegué.

Me pasó a buscar el coordinador de servicios generales, Juan Carlos; y con marcada vacilación me explicó unos problemitas que sucedieron en la obra.

"Se cagaron a tiros entre los obreros."

Fuimos al supermercado, compré provisiones y llegué a mi casita.

Mañana, a la obra.

jueves, 14 de junio de 2012

Deadline

Supuestamente me voy el lunes; vía Calafate. Y de Calafate en bondi hasta Río Turbo.

El problema no es el transporte aéreo. El problema es el transporte terrestre, porque aún no se quién paga el remisse hasta Aeroparque ni el bus desde Calafate hasta RT (200 Km).

"No hay un mango."

¿Y yo voy a financiar a una multinacional?

Tal vez. Depende cual sea mi humor del lunes.

sábado, 9 de junio de 2012

Todo lo que dejamos atrás



Cuando no se puede pasar el marco de la puerta y nos trabamos en un campo de fuerza implacable, y no pasamos, y no pasamos.

Una burbuja de titanio invisible nos impide pasar, hasta que explota y pasamos.

Y nos olvidamos de todo, todos y todas.

Hasta parece que alcanzamos tocar la asíntota de la histeria sin fin.

viernes, 8 de junio de 2012

El Semblante de un Hombre Derrotado

Yo ya había oído sobre Carlos Ompel. Nada en especial, sólo su nombre y que algo había tenido que ver con Construx. Hace una semana lo conocí. Es el responsable de control de costos; algo que parece haber brillado por su ausencia en este proyecto.
Abel conocía a Ompel. Aquél lo había contratado en Construx, luego se fue, y más tarde apareció en Tecniberia, la empresa española que es dueña de la mitad de Construx. Hoy está acá, en Tecniberia, como un musgo en un rincón de un edificio humedecido.
Su saludo fue escueto, levantó por un instante imperceptible sus ojos y siguió mirando para abajo. Mirando sus cosas. Sus planillas inservibles. El poco pelo que tiene se lo peina para un costado, para ocultar su calva. No mira cuando uno lo saluda y apenas esboza un gutural saludo que significa “Que ni se te ocurra a pedirme algo”.
Todos saben que Ompel se pasa el día jugando al solitario. Su excusa es que no puede hacer nada con el quilombo que es este proyecto. En las reuniones permanece en silencio, muerde suavemente sus labios, golpea delicadamente la mesa con la punta de su birome y niega sutilmente con la cabeza.
Todos saben que Ompel es un hombre derrotado.

martes, 5 de junio de 2012

Nervios en la panza

Frente al abismo se agrandan los pasos de los elefantes en mis intestinos. Duelen, crujen, suenan y no me dan respiro.

El malestar intestinal genera miedos o los miedos generan malestar intestinal.

Paradoja que no se resuelve y todo suena a arrepentimiento. La ruta, el semáforo, el frío, el tránsito, las bufandas, el cordón de la vereda. Y sigo sin comer. Y no aguanto. No aguanto. No aguanto.

Y fui a la guardia del Hospital Alemán. Y seguían mis datos viejos allí, de cuando yo era chico. Del departamento de Libertad. De cuando mi mamá me llevó por una fuertísima resaca.

Y no tenía nada.

Dieta, pastillitas y ya está.

Misterioso contacto me apareció en el chat de la BlackBerry.

¿Broma de mal gusto o un llamado desde el cielo?

jueves, 31 de mayo de 2012

El Fantasma de Puerto Madero

Caminé entre mi nuevo trabajo y el viejo. Me aparecí ante algunos viejos, quienes atónitos, a penas me reconocían.

Caminé entre un nuevo infierno y un pasado purgatorio, con un sol cálido e inesperado en la frente; que me hacía resplandecer entre los vivos.

Con un grillete electrónico...

Me dieron una BlackBerry y en Río Turbio ya hace -15° C. En dos semanas parto.

Este es el fin.